jueves, 18 de marzo de 2010

El Consistorio da luz verde para que la cubierta de la piscina de Mendizorroza esté lista en algo más de tres meses

Ése será el plazo necesario para instalar el vaso de la piscina cubierta de Mendizorroza. El gabinete Lazcoz prevé, así, que el recinto esté listo para la próxima temporada de baño y despeja las dudas surgidas en torno a la esperada finalización de las obras.

La Junta de Gobierno local prevé adjudicar hoy de forma definitiva los trabajos de colocación del vaso, que cuentan con un presupuesto de 1.751.685 euros. El equipo de gobierno dará de esta forma luz verde al remate de esta construcción, unos trámites que ya se fijaron hace ahora un mes, cuando el Consistorio escogió a Aquamader entre las cuatro empresas que optaban al proyecto. El punto fuerte de esta compañía era que, frente a los 4,5 meses en los que se calculaban los trabajos, permitía reducir ese plazo en treinta días.

La decisión que hoy adopta el Ejecutivo local, por tanto, supone el inicio de la cuenta atrás para el final de las obras. Apenas cinco días después desde que se notifique esta decisión, arranca el mencionado margen de 105 días para rematar la piscina cubierta.

Esta adjudicación supone el espaldarazo definitivo para una obra que iba camino de convertirse en el cuento de nunca acabar. La reforma del complejo de Mendizorroza se impulsó hace ya cinco años y, desde entonces, ha sufrido todo tipo de percances. Discusiones políticas por el sobrecoste del proyecto, una fuga de agua en las piscinas descubiertas en 2007, una ansiada reapertura en agosto de 2009... En cuanto a la cubierta, ha superado ya cambios en el proyecto y diversas fechas de inauguración. Se habló de primavera de 2010 y, después, de verano de este año, pero todo se puso en duda a finales del año pasado cuando se conoció un nuevo inconveniente: el anterior gabinete Alonso no encargó la urbanización del entorno ni la estructura de las piletas.

El ejecutivo Lazcoz, mientras, optó por esperar a dar el paso de instalar los vasos hasta que se finalizara la estructura del edificio. Esta apuesta obligaba a llevar a cabo una llamativa solución, según explicaron fuentes municipales, que consiste en introducir los vasos, por piezas, a través del garaje. Con la adjudicación definitiva, se solventan las nuevas dudas surgidas en torno a si la finalización de las obras llegaría a tiempo para el verano. La piscina cubierta de Mendizorroza afronta, por fin, su recta final.

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